En el transcurso de los años hemos podido observar innumerables casos de adulteración de nacionalidades por parte de jugadores amateurs y profesionales que se desarrollan en el fútbol ecuatoriano sin poder encontrar una solución óptima que nos permita detener estas situaciones.
El jugador de Barcelona S.C., Byron Castillo se suma al listado de jugadores como Alexander Domínguez ex Liga Deportiva Universitaria de Quito, Rinson López ex El Nacional, Carlos Moreno ex C.S. Emelec y muchos más de acuerdo con la información emitida por la Federación Ecuatoriana de Fútbol en la que sancionó a 75 futbolistas con documentos adulterados y cambios de nacionalidad por la Comisión Disciplinaria en el año 2018.
Esta situación ha ocasionado cierto recelo y dudas por parte de los que integran el mundo del fútbol ecuatoriano. Federación, clubes, entrenadores, periodistas y hasta hinchas en muchas ocasiones desconfían del origen del jugador por todos los casos en que por obtener alguna oportunidad adulteran sus datos, cambiando su edad o nacionalidad por confiar en personas que le hacen un daño al fútbol ecuatoriano y a los propios jugadores.
Esta situación ha hecho que se busquen soluciones que permitan cortar de raíz los problemas de las adulteraciones en la edad y nacionalidad, llevando a que se firme un convenio entre el Registro Civil Ecuatoriano y la Federación Ecuatoriana de Fútbol con el objetivo de garantizar la información declarada para el registro de jugadores. Además de eso, yo propongo que se tome en consideración el artículo 19 del Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores para ser incluido dentro de la normativa deportiva ecuatoriana.
Una de las excepciones mencionadas en dicho reglamento, para poder fichar jugadores menores de edad, es que el jugador viva a 50km de distancia de una frontera nacional y que el club por el que desee ser registrado se encuentre también dentro de ese espectro de 50km de distancia de una frontera nacional, siendo así que la máxima distancia entre el domicilio del jugador y el club es de 100km.
En casos como esos, el jugador podrá seguir viviendo en su domicilio y ser registrado para el club que él desee siempre que este dentro de esos 100km. Para poder ilustrarlo mejor, pondré a manera de ejemplo el caso de un jugador nacido en Potosí, Colombia que desee ser registrado en un club en la ciudad de Tulcán, Ecuador.
La distancia entre ambas ciudades es de 22km, por lo que si se aplica lo mencionado en el articulo 19, este jugador menor de edad, podrá vivir en Potosí, Colombia y estar registrado por un club ubicado en la ciudad de Tulcán, Ecuador. Incluso siguiendo la línea del propio ejemplo, si este jugador nace en la ciudad de Pasto, Colombia podría ser registrado por un club en la ciudad de Tulcán, Ecuador en aplicación del artículo 19 del reglamento, ya que la distancia entre ambas ciudades es de 92km.
Este mismo ejemplo podría pasar en sentido contrario, que el jugador sea nacido en Tulcán, Ecuador y desee registrarse para un club ubicado en la ciudad de Pasto, Colombia.
Además del cumplimiento respecto a la distancia mencionada por el artículo 19 del reglamento; es necesario que ambas federaciones, es decir, tanto la Federación Ecuatoriana de Fútbol como la Federación Colombiana de Fútbol tengan un acuerdo en el que puedan dar su consentimiento explícito de cooperación para casos de futbolistas nacidos en la frontera entre Ecuador y Colombia o en su defecto nacidos en la frontera con Perú.
En estos momentos de campaña electoral para la presidencia de la Federación Ecuatoriana de Fútbol, invitó a los candidatos a trabajar en esta solución solicitando un convenio con los países fronterizos bajo los parámetros dispuestos por la FIFA.
Santiago Zambrano